EN PAZ DESCANSE MAESTRO TOLEDO

     Volarán los papalotes para buscar al activista que defienda los derechos humanos de la represión de Estado, como cuando los elevó en la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa en los cielos.

     La fuerza del vuelo y las delgadas líneas del papalote de tus creativas ideas serán el enlace de la cultura que enarbola el pensamiento del zapoteca que hoy desaparece en materia pero que en espíritu habita en el arte y en las calles de Oaxaca.

     En el 2006, el activista y pintor Chico Toledo fue parte importante de la defensa de los derechos humanos del pueblo oaxaqueño que vivió la dura amenaza represiva y de persecución de la Policía Federal Preventiva del Estado Mexicano.

     Francisco Toledo y el comité de Liberación 25 de Noviembre del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) intervinieron de forma importante para lograr la liberación de las personas detenidas con lujo de violencia y de forma arbitraria durante la mano dura del asesino de Antequera Ulises Ruiz Ortiz contra la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO).

     El 19 de junio de 2016, en la carta abierta dirigida a los artistas y defensores de derechos humanos Toledo denunció y condenó los actos de provocación y barbarie del gobierno peñista y de Gabino Cué en los 37 sectores sindicales del Estado donde se mantenían los bloqueos carreteros por la exigencia de diálogo y el destierro de la cerrazón tanto de la SEP como de la SEGOB.

     En su carta señalaba que “Una Reforma Educativa debe ser pretexto para la discusión de ideas, no un pretexto para reprimir y acabar con los opositores, mediante el uso desmedido de la fuerza pública y llenar las cárceles de inconformes”.

     Hoy, ante su muerte queda el legado cultural de Chico Toledo, la vida zapoteca que proyecta a Oaxaca en el arte, en la escritura, en la defensa del maíz, del territorio, del agua y de los derechos humanos.

CENCOS XXII – PRENSA Y PROPAGANDA